A sólo 2 meses...

Esta es una imagen perfecta lo que sería planificar un nuevo rumbo, una cantidad de maletas ajustadas a un peso y un destino específico en el mundo, en el fondo quisiéramos que nuestra propia vida cupiese en tan minúsculo espacio. La verdad, son infinitas cosas las que dejamos atrás, empezado por la familia, amigos, compañeros, trabajo, rutina, etc... Muchas, por supuesto; no serán producto de mi melancolía, pero evidentemente, habrá de sobra a quien extrañar.

Hoy estoy precisamente a 2 meses de mi partida, si, MI partida; ya que en principio viajo sola, sin esposo y sin hija! OH! Cómo voy a soportarlo, no lo sé, pero es parte del sacrificio que hay que hacer. Ellos luego irán en semana santa (mes y medio después) la niña se queda conmigo y el regresará a culminar su año académico en la Universidad y por fin quedarse en Chile a partir de agosto. 

Este cambio de vida, se lo debo inicialmente a mi cuñada Leti, que ha vivido en Santiago los dos últimos años y le ha ido super bien, ya está por culminar su Maestría para empezar ahora el campo laboral, en el que tiene muchas oportunidades. Ella vivió el terremoto de febrero, pero aún despues de ese susto, prefiere vivir las vicisitudes naturales y no aquí las humanas. Igualmente en febrero, se va con nosotras mi otra cuñada Machi, así que las 3 juntas a conquistar el mundo (realmente sólo Chile, por el momento.)

Alguien me preguntó en algún momento, que por qué me quería ir, que después quien iba a visitarme. A lo que respondí: Exactamente quienes me visitan viviendo en Mérida: Mi mamá, mi hermana, mis amigos... Aunque no lo crean, para el resto del país vivir en Mérida es como estar del otro lado del Atlántico. Pero bueno, esas personas a las que extrañaré, son las que sé que seguiré viendo con frecuencia y tendré allá de seguro para compartir miles de cosas nuevas.

Así que bueno, les dejo lo que realmente será mi maleta:

Un desastre de emociones, de recuerdos, de vivencias, de cariño, de todo un poco... Pero en fin, lo que más necesito para comenzar y lo que me ha hecho hoy quien soy.

Si Dios quiere, nos leeremos el próximo año... Este, se lo llevó quien lo trajo y quien nunca nos lo podrá quitar: el tiempo.

De nuevo, felices fiestas... Compartan, amen, viajen, disfruten, de eso se trata la vida!

¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO 2011!!!